La UCR en marcha.

“Ricardo Alfonsín (hijo) esta originando un verdadero tsunami en la política Nacional y en especial dentro de las filas del partido centenario,……. se vive dentro de la UCR el efecto Alfonsín 82”, me dijo un hombre radical, “hay una euforia en cada acto que me hace acordar a Raúl Padre…,” terminó diciendo. Claro es alguien que está viviendo muy de cerca la recorrida del candidato por los diferentes destinos visitados, y que como bien dijo, “es increíble la necesidad que tiene la gente de escuchar una alternativa al presente político argentino”.

Si es Alfonsín o Cobos el candidato del radicalismo se va a saber recién en agosto del próximo año, después de las internas programadas.
Ambos tienen antecedentes que avalan sus intenciones, Cobos ganó protagonismo después de su voto “no positivo” que definió la disputa del campo con el gobierno de Cristina, y su gestión frente a la gobernación de su provincia, Mendoza y posterior desempeño en la presidencia de la Cámara de Senadores.
Ricardo Alfonsín, por su lado, ganó las internas pasadas, teniendo al mismísimo Cobos enfrente. Y se mantiene alejado de los viejos carnotauros de la política radical de los 80”, tan cuestionados por los mismos correligionarios, después del gobierno de De la Rua.

Desde lo local, insisten en no querer tomar la posta rumbo al tercer piso, “es incinerarse”, me dijo uno de los posibles, “mucha obra pública, opacaría la intensión por buena que sea”, finalizó.
“No deja de ser cierto, pero todavía tengo presente las legislativas del 2009, triunfo oficialista, con no más del 28% y una oposición partida en dos” agregó el otro comensal que presenciaba en la mesa del café.
Yendo a la quinta sección electoral, Enrique Honores, asumido en su cargo provincial, habría estado solicitando lugar en la lista de posibles Diputados Provinciales para Susana, su hermana y acompañando a Ricardo Jano. Sin Susana y sin Patelo, me caen un par de fichas, pero las guardo para después de la pausa, el próximo número.